Las gotas de lluvia irrumpían en la sala, imparables. Las varias capas de lona que deberían haber estado protegiéndonos no habían servido para nada. Y precisamente por eso me encantaban esas gotitas. Su manera de abrirse paso a través de cualquier obstáculo me recordaba qué habíamos conseguido, cómo habíamos sobrevivido, y cómo, al igual que las gotas siempre acababan chocando contra nuestros cascos, ya de por sí empapados, nosotros acabaríamos por ganar la guerra.
Eran tiempos difíciles, si, pero los teníamos a ellos. Ice Scream, Soundspeed, Dr.Random… y Lightspeed.
Claro, ellos tenían a sus propios secuaces híper hormonados, pero eran en su mayoría idiotas que no sabían usar sus poderes. Aún guardo la culata de mi rifle, con sus muescas. Una por cada capa abatida.
Eran tiempos difíciles, pero sobrevivimos, al igual que sobreviviremos hoy.
-¿Seguro que sobreviviremos?- inquirió su hijo.
-Anda, di mi nombre.
-Eres… Elena García.
Asintió con la cabeza, conteniendo la sonrisa.
-¿Y mi otro nombre?
Su hijo la miró sorprendido, temiendo romper el tabú.
-Eres…- su sorpresa fue sustituida por orgullo, que lo hinchó mientras hablaba, aún delante de los demás estudiantes del colegio.-Eres Pisada, la heroína más grande que ha conocido la ciudad.
